Sensual, Minimalista y Elegante. Estas son algunas de las palabras con las que podemos describir a este brebaje que a pesar de su simpleza guarda cierta mística en su interior. Sus 3 ingredientes, Gin, Vermouth y Campari, parecen ser almas gemelas que pueden jugar entre si en cualquier proporción y siempre resultarán en una bebida espectacular, creemos que de ahí viene la magia del Coctel Negroni, pero su trascendencia viene de una increíble narrativa histórica que se creo alrededor de este elixir carmesí. ¡ Agarren sus Negronis y vamos a conocerla!
La historia del Negroni.
Esta historia a pesar de ser muy antigua, no siempre fue tan conocida alrededor del mundo, el cóctel fue creado a vísperas de la prohibición en Estados Unidos y esto nos explica porqué no tuvo un lugar relevante en este USA, donde el bar y el arte de ser cantinero tuvieron el mayor auge y desarrollo, y tampoco en muchos textos de esta índole. No fue si no hasta después de la segunda guerra mundial que comenzó a vislumbrarse en bares y menús de restaurantes. Aunque esta maravillosa creación nunca ha muerto, su verdadero momento de gloria es hoy, la nueva era dorada de la coctelería lo trajo de vuelta para posicionarse en el salón de la fama de los cócteles junto a otros como el Manhattan y el Old Fashioned, convirtiéndose así, en uno de los preferidos de los cantineros alrededor del mundo. Ahora vamos a profundizar en la historia del Negroni y sus antepasados color rubí.
Los predecesores: El Americano, El Milano – Torino, y El Torino – Milano.
Antes de llegar al momento exacto de su creación, tenemos que entender el contexto en que tuvo lugar y necesitamos saber cuales son las bebidas que preceden la historia del Negroni.
En 1919 el Conde Camillo Negroni le pidió al bartender del Café Casoni que le hiciese un Americano y que en lugar de Club Soda, le agregara Gin; pero, ¿Qué era un Americano?. El Americano es al Negroni lo que el Martinez es al Martini, su predecesor, sin Americano no tendría sentido hablar de Negroni. El Americano era un Coctel preparado con Vermouth, Campari y Club Soda que a inicios del siglo 20 era el furor en todos los cafés de Italia.
Los Italianos, tenían una costumbre muy arraigada de tomar bebidas Aperitivas como Amaros (licores de hierbas) y bebidas digestivas como brandy o Eau de vie.
Las bebidas amargas habían estallado en su popularidad luego de que el primer Vermouth fuese comercializado por Antonio Benedetto Carpano en 1786 en Turin. Luego de este suceso, muchas marcas de Amaros como Fernet Branca, Cynar y por supuesto Campari, vieron un mercado para las bebidas amargas que no dudaron en explotar. Aquí podemos ver que como para ese entonces ya existían y eran bien conocidos los ingredientes de un Americano (Vermouth, Campari, Soda), solo era necesario el paladar de un sibarita que guste de nuevos sabores y mezclas.
El Americano a su vez era precedido por otro coctel conocido como MI-TO o Milano – Torino y a pesar de haber muchas historias de su origen, tanto Gary Regan y Dom Costa, aseguran que fue una simple variación tal vez motivada por el deseo de agregar un toque spritz o refrescante a la ya popular bebida MI-TO (Combinación de Bitter Campari de Milano y Vermouth di Torino), añadiendo un poco de Club Soda que resultaría en el Americano. Dom Costa también brinda un dato muy interesante y que ha sido de poco estudio, resulta que antes del MI-TO, existía un cóctel llamado Torino-Milano, el cual estaba compuesto de Campari y Amaro de Cora, este último es un maravilloso Amaro Italiano que tiene unas notas florales muy prominentes en Nariz, y en boca una maravillosa combinación de Naranja y Canela.
Conde Negroni: Historia de un Sibarita, Trotamundos y amante de las nuevas experiencias.
Volviendo atrás a 1919 en Florencia, tanto el Americano, como el MI-TO, eran ya por un buen tiempo bebidas muy consumidas por la sociedad Italiana. En ese momento un hombre entra a su bar favorito, el Café Casoni y le pide a su Bartender Fosco Scarselli, que le haga un Americano intercambiando la Club Soda por Gin. Ese hombre era el Conde Negroni, quien por cierto, llegaba de Estados Unidos de tener una vida muy agitada y emocionante como apostador y vaquero de rodeos. ¡El Conde Negroni sabía cómo divertirse!
No hay historia del Negroni sin historia del Conde Camillo Negroni.
Según investigaciones del historiador bartender David Wondrich, se encontró que el Conde nació un 25 de Mayo de 1868, que su nombre completo era Camillo Luigi Manfredo Maria Negroni, y que sus padres eran el Conde Enrico Negroni y Ada Savage Landor; de aquí podemos aclarar que a diferencia de muchas teorías, este personaje en realidad si existió y además era realmente un Conde. Antes de volver a Florencia en 1906, el Conde Camillo Negroni viajó por el mundo y uno de estos viajes lo llevó en 1880 a Estados Unidos, donde se convirtió en un ícono. Esto lo sabemos por una nota de un periodista, que en 1928 escribió para el periódico Spokane Chronicle. El periodista se llamaba Bob Davis y cuenta que en un viaje a Italia luego de andar por la ciudad con un chofer que no hablaba nada de inglés, apenas se bajó del auto se topó con un personaje llamativo que andaba a caballo.
Bob Davis redacta lo siguiente:
“No hay nada inusual en un hombre cabalgando en un Cayuse (caballo salvaje o de baja calidad), pero cuando el jinete usa un quirt [un látigo de cuero trenzado] enrollado en su muñeca derecha, el caballo tiene un galope un poco español y tiene cubierta la la espalda del caballo con una silla mexicana, es una señal al menos para mí, de que mi lengua materna es debida y apreciada “, escribe Davis.
Davis le pregunta a este hombre si hablaba inglés y este responde que si. Cuando el hombre a caballo se presenta, resultó ser el Conde Camillo Negroni y Davis le dice lo siguiente:
“¿No eres el conde Camillo Negroni quien alrededor de 1898 con el entonces campeón del mundo, convirtió un puñado de alimento para pollos en $ 7,000 dólares en la pista de carreras de Jamaica? (hablan de apuestas en carreras de caballos) Recuerdo una cena que dieron tú y Fitz en el restaurante de Hahn en Park Row para celebrar la gran victoria. A menos que me equivoque mucho, todo el fajo de dinero fue cuidadosamente eliminado de tu patrimonio en una partida de póquer de lujo.”
¿Qué aprendemos de este suceso? Por un lado, que sin duda existía un hombre llamado Conde Camillo Negroni, que era una leyenda en los Estados Unidos por su personalidad de vaquero, que tenía una inclinación por el juego y su amor por las grandes fiestas. Si bien el artículo no menciona la bebida homónima del Conde Negroni, no es difícil imaginar que habría regresado a Italia desde Nueva York y exigió que su cantinero cambiara la Club soda por el Gin en su Americano. ¿Todo un personaje no?.
¿Existe otra historia del Conde Negroni?
Existe también otra versión que nos brinda Noel Negroni, un descendiente del General Pascal Olivier Conde de Negroni, quien alega que su ancestro inventó la bebida en 1913. Se han hecho las respectivas investigaciones y simplemente no hay pruebas que lo sitúen a el en esta historia.
Por otro lado a nuestro icónico Conde Camillo Negroni lo sitúa en la historia de este gran trago, una carta que recibió el 13 de Octubre de 1920, enviada desde Inglaterra por Frances Harper de Chelsea y dirigida a “Mi Querido Negroni” que dice lo siguiente:
“Dices que puedes beber, fumar y estoy seguro de reír tanto como siempre [evidentemente Negroni había estado enfermo]. ¡Siento que no tienes mucho de que compadecerte! ¡No debes tomar más de 20 Negronis en un día! ”
De acuerdo a Fosco Scarselli, el Conde bebía alrededor de 40 Negronis al día, entonces una petición de 20 al día, implicaba una solicitud de austeridad. (Cabe aclarar que los Negronis se servían en pequeñas copas, posiblemente de Jerez, es decir 60 ml). Lo grandioso de esta carta es que relaciona directamente al Conde Camillo Negroni con su bebida homónima y su pequeña adicción.
El Conde moriría el 25 de Septiembre de 1934, pero viviría por el resto de la eternidad en las mejores barras del mundo.
Ya dejando clara la fabulosa historia del Conde y su bebida, vamos a ver un par de recetas y variaciones de este, que seguramente hubiese disfrutado Camillo y algunas que seguramente no tanto.
Sin Campari No Hay Negroni.
Como dice Gary Regan en su libro “Drinking la Dolce Vita. El Negroni”, en la actualidad para hacer un Negroni, puedes escoger entre miles de botellas de Gin que hay en el mercado, y obtendrás resultados muy distintos con cada una. Igualmente pasa con el Vermouth, puesto que el mercado actual también nos permite una variedad considerable que aportan distintos matices. Pero hay una pieza clave que nació con el Negroni y que aunque busques una variación no podrás cambiarlo. Esa pieza es el Campari o “Bitter All’Huso D’Holanda” como fue inicialmente llamado. Campari tiene su particular sabor inscrito en el ADN de este gran cóctel y en palabras de Regan, “sin Campari no hay Negroni”.
Antes de seguir con este viaje, queremos compartir una reflexión para aquellos cantineros que sostienen que un Negroni solo puede prepararse bajo la proporción 1:1:1. Debemos pensar si los bartenders son replicadores de recetas únicamente, o son creadores de bebidas, bebidas que se adaptan al paladar y al momento de cada persona, así que no se limiten en experimentar con esta receta tan clásica e icónica. Ahora vamos con las recetas más famosas del Negroni.
Las siguientes recetas son las recomendaciones del libro “Drinking la Dolce Vita. El Negroni” de Gary Regan.
Negroni Clásico 1:1:1.
Receta:
1 Onza de Gin.
1 Onza de Vermouth dulce.
1 Onza de Campari.
-Agrega todos los ingredientes directo a un vaso Old Fashioned, refresca un poco hielo y como Garnish agrega un twist de Naranja.
*Gary recomienda usar una Gin con mucha presencia de enebro, y en cuestión de Vermouth, el se va por algunas marcas de Vermouth francés que tienden a ser más frutales con sabores a bayas más marcados y balanceados, no excesivamente especiados como algunas marcas contemporáneas.
Milano – Torino (Mi-To).
Receta:
1 ½ Onza de Vermouth Dulce.
1 ½ Onza de Campari.
-Agrega todos los ingredientes directo a un vaso Old Fashioned, refresca un poco con hielo y como Garnish agrega un twist de Naranja.
*Gary recomienda usar Martini Rosso como Vermouth, pues no tiene unas notas tan prominentes a bayas y frutas como algunos franceses, y al momento de bailar con el Campari, ninguno pierde el paso.
Americano.
Receta:
1 ½ Onza de Vermouth Dulce.
1 ½ Onza de Campari.
2 Onzas Club Soda
-Agrega todos los ingredientes directo a un vaso Highball lleno de hielo, termina con la Club Soda y como Garnish agrega un twist de Naranja.
*Este era el cóctel que el según la historia del Negroni, el Conde ordenó modificar, pues para el parecía no ser lo suficientemente fuerte.
Negroni Sbagliato.
Receta:
1 Onza de Vermouth Dulce.
1 Onza de Campari.
1 Onza Prosecco (u otro Vino espumoso seco)
-Refresca con hielo el Vermouth y el Campari por aparte, luego incorpora estos en el Prosecco en una vaso Old Fashioned, como Garnish agrega una rodaja de Naranja.
*Este cóctel es la especialidad del Bar Basso en Milán, “Sbagliato” traduce Error, o equivocación, y esto se debe a que su creación lo fue. En 1972, el bartender Mirko Stocchetto uso por error una botella de vino espumoso en lugar de Gin, no se percató de la situación y el cliente que esperaba un Negroni Clásico, quedó encantado con la nueva variación, y esa es la historia del el Negroni Sbagliato.
My Old Pal.
Receta:
1 ½ Onza de Whisky de Centeno.
1 Onza de Campari.
1 Onza Vermouth Seco (versión 1922) ó Vermouth Dulce (Versión 1927)
-Refresca todos los ingredientes en un Vaso mezclador con hielo, luego sirve en una copa Coupe y como Garnish agrega un twist de Naranja.
*Este cóctel tiene dos orígenes (aún es material de investigación) uno dice que se creó en 1922 y la versión de 1927, asegura que este habría sido creado en 1878, lo que significaría que es uno de los padres del Negroni, pero como dije, aún es material de Investigación.
Boulevardier.
Receta:
1 ½ Onza de Whisky Bourbon.
1 Onza de Campari.
1 Onza Vermouth Dulce.
-Refresca todos los ingredientes en un Vaso mezclador con mucho hielo por un buen tiempo, luego sirve en una copa Coupe, y como Garnish agrega un twist de Limón, o una cereza, o una rodaja de Naranja.
*Este cóctel aparece por primera vez en 1927 en el libro de Harry McHelon “Barflies and Cocktails”, su nombre se debe a una revista Francesa que comenzó sus publicaciones en el mismo año, en la que escritores muy famosos contribuían y por supuesto hablaban de las grandes bebidas de la ciudad de las luces.
Espero que luego de degustar la historia del Negroni y tengan su preferido en la mano. Ahora, como es costumbre, brindemos por aquellas historias que hacen que nuestros tragos sepan aún mejor.
¡SALUD!
muy completa información…excelente